Uno de los mas nocivos y toxicos efectos a nuestra pobre y cada vez mas debil atmosfera; es el dioxido de carbono (CO2). Los autos generan muchisimo, pero hay un animalito que genera muchisimo mas, practicamente el doble. Son las queridas y ponderadas vaquitas que uno ve en el campo, que ademas de generar el dioxido, tambien en su proceso digestivo, generan tanto metano que el efecto invernadero se hace un festin cada vez que oye una flatulencia o un eructo de vaca (???).
Ojo, que este poder nocivo del aparato digestivo vacuno tambien puede revertirse en beneficios monetarios para quien manipula al animalito que dia a dia nos proporciona la carne de las milangas, la del asado y la de las hamburguesas (por citar un ejemplo) que puede instalar elementos que convierten al metano en energia que se puede usar en calefaccion o en transporte.
Pero, al parecer, no alcanzaba con sacarle redito energetico al asunto. El currito continua de la mano de una empresa alemana (http://www.stallduft.de) que vende pedos en lata, asi como lo lee (y se creian vivos los que vendian aire puro de las sierras, o agua de los manantiales... giles!)
Cuentan los marketineros de esta poderosa empresa fetida, que recurriendo a la añoranza del campo, el curro puede ser posible. Gente que quiza vivia de chica en estancias, hoy huele esta lata apestosa, y recuerda cuando ordeño su primera vaquita (o levanto el primer kilo de soretes).
Una bicoca que solo cuesta 5,95 € promocionada como “el aroma de campo original enlatado” y estan diseñadas para abrir, oler, tomar coraje y mandarse una aspirada fuerte y cerrar, mientras el aroma agrario se introduce por el sentido del olfato hasta tu alma (???).
El exito es tal, que ya planean extender los aromas a otros extractos que el campo proporciona, como el de caballo, el de paja y el de los cerdos dentro de un chiquero. Aunque orgullosos, saben que su exito es el aroma a campo (y los gases de las vacas, porsupollo)