Como si al destino no le alcanzara con poner arbolitos, adornitos, darte un sueldo paupérrimo para que te lo gastes en este mes en regalitos para familiares que vemos solamente en estas etapas del año; además agréguele las noticias sobre papa Noel y grite Bingo!
En plena fiesta canadiense de víspera de fiestas, un hombre ebrio de 24 años empezó a gritar que Papa Noel no existia, causando la debacle, la hecatombe total; una seguidilla de lloriqueos bochornosos de una centena de niños presentes. Como consecuencia, fue detenido por la Policía por alteración del orden público, aunque simplemente peco de sincericida…
“Nos pareció realmente malicioso que alguien durante esta época del año les dijera a los niños que Santa no existe” comentó el agente Steve Koopman (pero nadie destaca la cantidad de plata que te ahorras una vez que se lo decis al bepi).
La Policía no hizo pública la identidad del alborotador navideño, pero sí confirmó que con sus acciones violó la libertad condicional bajo la que se encontraba en aquel momento. El hombre pasó una noche en el calabozo para recuperar la sobriedad, después de lo cual fue liberado bajo fianza. El departamento local de Policía emitió un mensaje mediante su cuenta de Twitter oficial donde bautizaban al hombre como el “Grinch intoxicado” por romper los corazones de decenas de niños en el desfile.