Panquequismo, deporte nacional.

Posted by | Posted in | Posted on 11:34

Los invito a leer el hermoso articulo que saco Claringarcha (o Vuvuneta) unos minutitos despues que nos quedamos afuera otra vez. Asi que ahora estaban todos peleados, que entrenaban poquito y nadie se acordo del cumple del pobre Pastore (?). Que algunos jugadores le pidieron al entrenador que siguiera y otros no (nos deberia interesar eso?) y la mar en coche...
Como si no lo tuvieran preparado de antemano, los amigos del diario mas cuestionado en estos tiempos estaban aguardando el momento para hacer saber la nueva tesitura. Supongo que tuvieron tiempo entre el primer gol aleman y el tiempo despues, donde de a poquito nos fuimos dando cuenta con el correr del partido (como ellos tambien) que la ibamos teniendo poquito a poquito bien adentro.
Los periodistas podran ser todo lo dados vuelta posible ahora, que la imagen de Diegote vende mas al golpearla, que al rendirle la pleitesia con la que lo acobijaban hace tres dias. Pero nosotros no estamos demasiado distantes. Nadie esta a salvo de este sindrome.
No hace falta ser comunicador social, inteligente o lector asiduo, gran jugador o simplemente un ateo futbolero,  para darse cuenta que las cosas no cambian de un dia para otro, que Argentina jugaba bien en ataque pero dejaba mucho que desear abajo, que el medio era tierra de nadie y que Mascherano no era el pulpo Paul, que ahora resulta que hace magia (?). Que en las eliminatorias dimos asco, y que los rivales del mundial hasta el mismismo Mexico, eran de un nivel pauperrimo. Asi y todo, existe una leve y sutil diferencia entre las ganas que tiene uno de ver a su pais triunfar y las maneras logicas de ver este hermoso deporte (me voy a dar vuelta para panquequear, perese un segundito)
El tema es que Maradona, aquel ser odiado y querido con los mismos niveles de intensidad, nos puede vender buzones y nosotros encargarnos de ponerle la estampilla, nomas. Hasta que las cosas se pudren y nos damos cuenta que  Diegote tambien se panquequeo: "Masche +10"; "Voy a jugar con cuatro centrales y dos puntas"; "Messi juega libre"; "No me caso con ningun jugador..." (podria seguir con oraciones embolantes, pero no).
Del sartenazo no se salvo nadies...
El argentino es campeon mundial de darse vuelta como una media, de virar para la conveniencia, de borocotear al mejor postor: de poseer el sindrome del panquequismo. Un deporte nacional que muchos practican por devocion, vocacion o simplemente, para cagarle la vida a otros. Y eso apena, realmente... Asi nos va, en todos los ambitos (y aunque suene un viejo choto al decirlo).

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¿Somos los unicos que nos quedamos con ganas de ver a 
Garce repartiendo patadas a los alemanes?
Este interrogante, y muchos mas, esta noche de 21 a 22

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